La cárcel de La Roca, en Guayaquil, es considerado uno de los centros penitenciarios más seguros del país. Así lo anunciaron desde su creación en el 2008 y también en 2022 cuando fue nuevamente aperturada.

Esta cárcel, desde sus inicios, fue construida con el objetivo de albergar a los delincuentes más peligrosos del país y cabecillas de bandas delictivas.

Pero hoy, el panorama es distinto. En menos de 60 días, la cárcel de La Roca se ha convertido en la prisión de personas vinculadas a la política y exfuncionarios judiciales.

El más reciente de los detenidos es el exvicepresidente Jorge Glas, quien fue detenido la noche del viernes, 5 de abril de 2024, en la embajada de México, en Quito.

La captura del exfuncionario se dio en medio de una irrupción a la embajada de México, que ha ocasionado que ese país rompa relaciones bilaterales con Ecuador.

Tras estos hechos, el exvicepresidente Jorge Glas, procesado y condenado por actos de corrupción, posiblemente sea trasladado a la cárcel de La Roca.

Allí compartiría espacios con otros políticos recién capturados. Uno de ellos es el exasambleísta Pablo M., quien es procesado por el caso Metástasis.

Otro procesado que guarda prisión en ese centro es el expresidente de la Judicatura, Wilman T., quien también está investigado por el caso Metástasis. Estos dos últimos son indagados y acusados por la Fiscalía por un presunto delito de delincuencia organizada. Según la Fiscalía, ellos habrían utilizado sus cargos políticos para tener injerencia en la justicia.

Wilman T. y Pablo M., fueron trasladados a La Roca el pasado fin de semana. Ellos estaban cumpliendo su prisión preventiva anteriormente en la cárcel 4 de Quito. Este centro también fue construido con un propósito distinto al que es utilizado. Su habilitación fue para albergar a policías y miembros de Fuerzas Armadas, pero con el pasar del tiempo fue el hogar de políticos, legisladores y hasta expresidentes.

Pero desde hace 60 días, los informes del Sistema Carcelario del País (SNAI) daban cuenta que ya no existía espacio para más detenidos.

Esa alerta coincide con el cambio de políticos a la cárcel de La Roca.

Otro de los nuevos internos de esta cárcel de Guayaquil es Sebastián B., hijo de la vicepresidenta de Ecuador, Verónica Abad. Él fue detenido el pasado 21 de marzo. La Fiscalía lo investiga por un presunto delito de oferta para realizar tráfico de influencias en la Vicepresidencia.

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