Tras el rompimiento de las relaciones exteriores entre México y Ecuador, la canciller del país centroamericano, Alicia Bárcena, informó que su país llevará el caso a la Corte Internacional de Justicia, pues el Gobierno ecuatoriano vulneró la inviolabilidad de las sedes diplomáticas, luego de que la Policía Nacional ingresó a la embajada mexicana para sacar a Jorge Glas.
Luis Narváez, experto en diplomacia, considera que la actuación del Gobierno ecuatoriano es censurable, pues significa la ruptura de las normas internacionales, lo cual podría implicar sanciones para Ecuador.
Según el experto, el Estado mexicano estaba protegido por la Convención de Viena sobre Relaciones Internacionales y otros tratados que han sido ratificados por el Ecuador, que establecen que una sede diplomática no puede ser vulnerada, hacerlo, rompe las reglas del Derecho Internacional.
La Corte Internacional de Justicia es el órgano de Naciones Unidas encargado de tramitar las disputas entre estados, los países miembros están obligados a acatar sus fallos. Entre las más recientes demandas que ha recibido este organismo se encuentra la de Ucrania contra Rusia y la de Palestina contra Israel.
Insistir en la vía diplomática y legal
Aunque acepta que la decisión final, sobre el otorgamiento del asilo a Glas, la tenía el Gobierno mexicano, Narváez considera que Ecuador no debió descartar la posibilidad de insistir, con argumentos legales, para probarle a México que el exvicepresidente no era un perseguido político, sino un sentenciado por corrupción; la opción de ingresar a la fuerza a la sede diplomática nunca debió ser considerada.
Con la posibilidad de negociar la entrega de Glas coincide la Asociación de Estudios Internacionales del Ecuador, organismo que agrupa a expertos en relaciones internacionales, los cuales consideran que el Gobierno ecuatoriano todavía contaba con herramientas políticas y diplomáticas para lograr la captura del prófugo, sin necesidad de tomar medidas unilaterales que pongan en riesgo una relación bilateral.
“Es lamentable que Ecuador no haya agotado los recursos políticos, diplomáticos y legales a su disposición para resolver las tensiones diplomáticas con México antes de tomar una acción tan drástica como el ingreso a la embajada mexicana”, señalaron los expertos.
Rechazo internacional
Para buscar un acercamiento entre las autoridades ecuatorianas y mexicanas, que les permita resolver sus diferencias de forma pacífica, la Organización de Estados Americanos (OEA) convocó a un Consejo Permanente.
Al momento se desconoce la fecha del encuentro, sin embargo, el organismo anticipó su rechazo a la actuación del Gobierno ecuatoriano.
«La Secretaría General rechaza cualquier acción violatoria o que ponga en riesgo la inviolabilidad de los locales de las misiones diplomáticas y reitera la obligación que tienen todos los Estados de no invocar normas de derecho interno para justificar el incumplimiento de sus obligaciones internacionales», afirmó el organismo.
Junto con la OEA, prácticamente todos los países de la región rechazaron el accionar de las autoridades ecuatorianas, incluso el Gobierno de Nicaragua, en solidaridad con México, también rompió relaciones internacionales con Ecuador.
El Departamento de Estado de Estados Unidos manifestó su rechazo ante la irrupción en la Embajada mexicana y exhortó a los dos países a resolver sus diferencias de acuerdo con las normas internacionales.
«Estados Unidos condena cualquier violación de la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y se toma muy en serio las obligaciones de los países bajo la ley internacional de respetar la inviolabilidad de las misiones diplomáticas», afirmó el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
Decisiones unilaterales
Además de las sanciones que Ecuador podría tener a nivel internacional, a los expertos también les preocupa las acciones unilaterales que México podría tomar, tras la ruptura de relaciones internacionales.
Si el Gobierno mexicano ordena la salida de todos sus diplomáticos se dejaría en indefensión a los mexicanos que viven en territorio ecuatoriano; además, se dificultaría el trámite de visado para los ecuatorianos, la atención seguramente se trasladará a consulados de países vecinos, como Perú o Colombia.
Durante su primera declaración pública, tras la irrupción en la embajada mexicana, la canciller ecuatoriana, Gabriela Sommerfeld, justificó el accionar del Gobierno ante el riesgo de fuga de Glas.
Sommerfeld no informó cómo se procederá con el personal diplomático ecuatoriano que trabaja en México, si este será retirado, tampoco dijo cómo será la relación a futuro.
Glas a La Roca
Tras ser extraído de la embajada de México en Quito, cerca de la medianoche del viernes 5 de abril del 2024, el exvicepresidente Jorge Glas fue llevado a la Unidad de Flagrancia de la Fiscalía General del Estado, de donde fue sacado la mañana del sábado, para, en un fuerte operativo policial ser llevado a Guayaquil.
Según informó el Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Privadas de la Libertad (SNAI), el exmandatario, tras pasar un examen médico de rutina, fue trasladado al Centro de Privación de Libertad Guayas Número 3, conocido como La Roca, una cárcel de máxima seguridad con capacidad para 100 reos.
Visiblemente cojeando y esposado, Glas fue trasladado por personal policial y militar; según el expresidente Rafael Correa, coideario del sentenciado, la falla en el pie se debe a que habría sido golpeado durante su arresto.