El Real Madrid es campeón de la Champions League, tras vencer 2 a 0 Borussia Dortmund, este 1 de junio de 2024.
Entender el Real Madrid es reconocer que el hombre que abrió la final con un impresionante gol de cabeza fue el de menor estatura entre los 22 jugadores en el campo.
Dani Carvajal, con sus 1.73 metros de altura, se elevó majestuosamente por encima de los gigantes alemanes para desmoronar la resistencia del Borussia Dortmund, allanando el camino para que los Blancos conquistaran su Decimoquinta Copa de Europa.
Este glorioso momento fue sellado por la sentencia final de Vinícius Júnior (0-2).
Fue una final trabada en la que el Borussia dispuso de 45 minutos para tener al Madrid maniatado, solo para que, al final, fueran los de Carlo Ancelotti quienes, como han hecho toda la vida, se salieran con la suya.
Un Inicio Complicado
La primera mitad del Madrid fue desafiante, con imprecisiones. Salieron con el dominio del balón, pero aún no habían encontrado su ritmo.
Mientras el esférico circulaba entre sus filas, era el Borussia Dortmund quien parecía tener el plan claro.
Los alemanes, con un desprecio estratégico por la posesión, enfocaron su juego en la velocidad, los espacios y la habilidad de sus extremos. Karim Adeyemi, en particular, puso a prueba a Dani Carvajal durante los primeros 45 minutos.
Carvajal, el veterano de seis finales, enfrentó dificultades ante el talentoso alemán.
Sin embargo, esta no fue una jugada aislada. Un tiro al palo de Füllkrug y dos espectaculares paradas de Courtois a disparos de Sabitzer y Adeyemi mantuvieron al Madrid en el juego.
A pesar de estos desafíos, el equipo sobrevivió a una primera mitad con una estadística de Goles Esperados (xG) de 1,7, demostrando la tenacidad y resistencia dignas de un catorce veces campeón.
La Resiliencia del Madrid
Ante esos 45 minutos, el Real Madrid mostró su fortaleza. En lugar de sucumbir ante la presión, el equipo mejoró.
Mantenerse en la misma línea o empeorar habría significado decir adiós a la ‘Orejona’. Sin embargo, el Madrid posee una resiliencia histórica, una capacidad para sobrevivir en momentos críticos.
La segunda mitad trajo consigo un cambio de energía. Carvajal surgió desde atrás para conectar una volea contra la defensa, enviando un claro mensaje de determinación.
Este fue solo el comienzo, seguido de una asombrosa intervención de Kobel ante un disparo de Kroos.
El Madrid, con su estilo característico de nervios de último minuto, se mantuvo en el partido. Actuaron con precisión única, como lo demostró la crucial parada de Courtois ante un cabezazo de Füllkrug.
Nacho mencionó previamente su preferencia por comenzar ganando, pero Ancelotti advirtió sobre la peligrosidad del partido.
Sin embargo, el equipo no solo enfrentó el peligro, sino que lo abrazó con determinación.
El Real Madrid nuevamente campeón de la Champions League
El Real Madrid se elevó por encima de los temores cuando Carvajal se lanzó hacia el primer palo en un córner magistralmente ejecutado por Kroos y la atmósfera cambió instantáneamente.
Carvajal, el orgulloso producto de la cantera madridista, emergió como un héroe en esa noche memorable.
La presión ahora recaía sobre los hombros de los jóvenes e inexpertos jugadores del Borussia Dortmund, quienes no pudieron resistir el empuje del Real Madrid.
En un momento crucial, Maatsen cometió un error catastrófico que abrió las puertas para el segundo gol.
Bellingham y Vinícius se encontraron en un dos para uno, y fue el inglés quien supo conectar con precisión con el brasileño. Vinícius, con un toque audaz y decidido, aseguró el gol que sellaría el título.
Así el Real Madrid es nuevamente campeón de la Champions League.
El Adiós de Kroos y la Gloria Eterna
La decimoquinta copa ya está en las vitrinas del club más grande de la historia de la Copa de Europa.
El adiós de Kroos, señalando el escudo, marcó el final de una era y el comienzo de otra con un título más para el Real Madrid.
Wembley se vistió de blanco para celebrar una victoria más en la legendaria historia del club.